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El Basket Puertollano recibe en la mañana de hoy, desde las doce en el pabellón Luís Casimiro al Carrascosa Moreno Azuqueca, en el partido perteneciente a la vigésima jornada de la Primera División Nacional. Un partido que será arbitrado por Botija Díaz y Martínez Brito.
A priori, el partido tiene signo visitante, puesto que la cuarta plata que ocupa el conjunto alcarreño es su principal aval para afrontar el partido ante los industriales que se mantienen antepenúltimos en la tabla pero con las opciones de permanencia intactas, ya que sus rivales directos en la lucha por seguir una temporada más en la Primera Nacional siguen pinchando en sus respectivos partidos.
Los rojillos, a pesar de su papel de víctimas, intentarán dar la campanada de la jornada y sorprender de este modo a los alcarreños que llegarán al Luís Casimiro con la única idea de obtener el triunfo para no abandonar la posición de privilegio que ocupa actualmente en la tabla clasificatoria, donde, si acabara la temporada al día de hoy, disputarían fase de ascenso a liga EBA, un premio y un éxito para un equipo como el alcarreño.
El equipo entrenado por Jesualdo sabe que una victoria en la mañana de hoy sería asegurar de manera casi definitiva la permanencia en la Primera Nacional una temporada más. Aún así, la clave de la actual campaña pasa por derrotar al Grupo 76 Al-Kasar y al Promociones Renova Uno La Solana que tienen que pasar por el municipal puertollanero.
Pero el interés no solo estará centrado en el partido que disputarán los chicos de Jesualdo mañana a las doce, sino que habrá que estar muy atentos a dos partidos claves para los intereses azules, los cuales se disputan en la tarde de hoy. El más importante, el Talavera – La Solana que arranca a las siete de la tarde y del que habrá que tomar buena nota de cara al futuro. Y media hora después, a las siete y media, el Grupo 76 Al-Kasar recibe al Albacete Baloncesto Cinco. Y es que, lamentablemente, los fines de semana ya no solo hay que centrarse en los puertollaneros, sino en sus rivales más directos. Toca sufrir.