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02/03/07 DE AFICIONADO A UTILLERO DEL EQUIPO

No todas las personas aficionadas al fútbol pueden decir lo mismo que nuestro protagonista de hoy. La primera vez que traspasó la línea que divide ser aficionado, de ser parte activa del equipo de tus amores, consigue el ascenso a Segunda B veinte años después. Y encima lo vivió desde dentro, siendo un miembro más de la plantilla. Querido y respetado. ¿Cuántos de ustedes hubieran querido estar en su pellejo aquella noche de Junio del 2006?
Al poco de empezar la temporada nos preguntó cuando le íbamos a hacer a él una entrevista, a lo que contesté “Cuando consigamos los 45 puntos y estemos salvados”. Lo prometido es deuda y hoy él es el protagonista de la UDP.

Si no lo han adivinado ya, estamos hablando de Jesús Parrilla Martínez, el utillero de la Unión Deportiva Puertollano. Jesús, a sus 61 años lleva toda su vida viendo jugar al Calvo Sotelo, ahora Unión Deportiva Puertollano. El día que le ofrecieron este cargo aceptó sin dudarlo un segundo. Se incorporó al equipo al inicio de la temporada 05/06, con lo que esta es su segunda temporada siendo el encargado del material y de que a los jugadores no les falte de nada. Desde una simple botella de agua hasta una sudadera, pantalón o peto. Su tesoro más codiciado son los balones, a los que no pierde de vista en ningún momento. Más de una carrera se ha pegado en los entrenamientos que el equipo realiza de vez en cuando en el césped artificial de Almodóvar del Campo, cuando un balón sale por encima de la valla dirigido hacia la calle.

Jesús pasa tanto tiempo con el equipo que “les considero mi familia. Todos me quieren mucho, aunque no suelen faltar las bromas y los cachondeos conmigo. El que más bromas me gasta es Carlitos Sanz, pero en un equipo si no hay bromas estás perdido”, nos comenta.
En el año y medio que lleva en el club, ha visitado infinidad de lugares por toda España. Los desplazamientos es una de las cosas que más le gustan, “El lugar más bonito que he visitado ha sido Fuerteventura cuando fuimos a jugar allí contra el Playas de Jandía. El norte también me gusta, pero lo malo es que llueve mucho”.
El ser utillero no le permite más distracción que la que puedan tener los propios jugadores “Yo, cuando ellos se van a la habitación me voy también. Recojo la ropa y me quedo viendo la tele, ya que estoy en una habitación yo sólo”. Además no bebe alcohol, aunque si fuma “Me fumo 2 paquetes diarios y beber no bebo nada más que Coca cola, me puedo beber 12 botes”. Pero les puedo asegurar que aún fumando esos dos paquetes, es capaz de aguantar el ritmo en carrera continua a cualquier jugador del equipo dando vueltas al campo.

El que ha tenido la oportunidad de ver a Jesús durante un partido, habrá podido comprobar que no para ni un minuto quieto “es que me pongo muy nervioso”, dice. Jesús esperaba ansioso los 45 puntos que daban la salvación y ahora que ya se han conseguido, no duda en afirmar que “nadie dude que los play off los vamos a jugar. Subir no se si subiremos, pero que juguemos el play off es más fácil, que me toque la Quiniela”. Jesús, al igual que muchos de los aficionados de Puertollano sueña con el ascenso a Segunda División “Ser el utillero y formar parte de este equipo en Segunda, para mi sería mi mayor satisfacción”.

Los recuerdos son parte importante para él. Y el destino ha querido que el mejor y el peor recuerdo se vean relacionados. Jesús guardaba con cariño un regalo “Le tenía mucho cariño a unas botas que me regaló El Chispas el día del ascenso”, pero la mala suerte ha querido que ese obsequio que Jesús guardaba como oro en paño fuese uno de los objetos robados el día en el que los amantes de lo ajeno, pasaron al Sánchez Menor a robar hace escasamente un més, “Me dio mucha pena ver que una de las cosas que se llevaron fuesen esas botas”.

Para Jesús tampoco pasa inadvertido que estos próximos partidos son importantes para el equipo, pero él lo tiene bien claro “Le vamos a ganar 2-0 al Talavera y luego vamos a sacar un empate en Fuenlabrada. Todo lo que no sea perder es bueno para el equipo”

Así, con esta premonición termina de atendernos Jesús. Los jugadores empiezan a saltar al campo y reclaman su presencia. Faltan dos sudaderas y allá va él rápido a por ellas. Eso si que es un buen utillero.

Texto y Fotos: Carlos Rodríguez