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Incidencias: Partido correspondiente a la Jornada 17 del grupo 1 de segunda división B. Cuatro mil espectadores en noche muy fría. El estado del terreno de juego en malas condiciones.
Arbitro: Perdigones Pacheco, Andaluz. Mostró tarjeta amarilla a Bustilo por la UDP y a Cusi por la Gimnástica.
Goles: 1-0 Min 66 Andrés Ramos (p); 2-0 Min 68 Andrés Ramos; 3-0 Min 87 David Sanz.
PUERTOLLANO MANDA
EL EQUIPO INDUSTRIAL SIGUE SEGUNDO, Y YA DISTANCIA EN OCHO PUNTOS AL QUINTO CLASIFICADO
La UD Puertollano se hace mayor. En el fin de un año histórico, los azules lo despiden tal y como lo empezaron, con el dulce sabor de la victoria. Lejos parecen ya los comienzos del 2006, cuando Sánchez De La Nieta y sus muchachos visitaban aquellos benditos campos de nuestra región en tercera división. Tiempos que ahora parecen prehistóricos. Aquel grupo de jugadores que soñaba con la segunda división B se ha convertido en un auténtico equipazo. Ahora, la definición de equipo revelación le empieza a venir pequeña. La victoria, excepto contadas excepciones, es plato único del día cada domingo en el Sánchez Menor y el objetivo de la salvación hace mucho que se quedó ridículo.
Hoy la victoria costó más trabajo de lo que se refleja en el marcador final. No fue hasta bien entrada la segunda parte cuando Andrés Ramos, que en los últimos partidos vive en un estado de gracia permanente, decidió que ya era hora de desequilibrar el choque y en dos arreones de clase desarboló a una muy seria Gimnástica de Torrelavega. Los cantabros venían con tan solo catorce goles encajados y hoy en un único partido ha recibido tres. Fiel retrato de lo que es, hoy en día, la UD Puertollano, un equipo con el que no te puedes descuidar nunca, porque siempre acaba matando.
La primera mitad es de las que entusiasma a los entrenadores, como se confirmó en rueda de prensa, pero que al resto de los mortales les parece un auténtico peñazo. Demasiado respeto, equipos muy ordenados y partido muy táctico. Si a estos ingredientes le añadimos un terreno de juego impracticable, el resultado es que hasta el minuto veintiocho las áreas parecían estar electrificadas.
Y entre bostezo y bostezo iban pasando los minutos hasta que llegó el veintiocho y en ese momento, una Gimnástica de Torrelavega que se había adaptado mejor al pasto (lo de pasto lo reflejamos de forma literal) pudo adelantarse en una doble ocasión clarísima. Primero Borrallo saco debajo del palo un disparo de Javi que se colaba sin remisión y a la salida del posterior saque de esquina, Siro puso a prueba a un espectacular Ruiz Caba. El Puertollano tenía poca fluidez en ataque, atascado en el barro y entretanto lo más positivo fueron los detalles de clase de Carlos Sanz, que a veces hacían que diéramos un pequeño respingo dentro de nuestro plácido sueño. La Gimnástica tuvo otra oportunidad antes del descanso en un remate al larguero de Pineda.
Pero lo que al resto de los mortales sí nos gusta es lo que se vio en la segunda mitad. La UD Puertollano mostró más profundidad y comenzó a llevar la iniciativa con cierta claridad. Se echó de menos en algunos momentos al sancionado Dupi, pero él centro del campo de la segunda mitad, con un Esparza protagonista, ponía de nuevo las cosas en su lugar.
Antes del momento clave del encuentro, Andrés Ramos estuvo a punto de marcar de cabeza en un centro de Conget pero el balón se fue arriba, transcurría el minuto cincuenta y ocho.
Y en él sesenta y seis Andrés Ramos se fue en banda derecha de cualquier ser viviente que se le aparecía y cuando entró en el área fue derribado. Parecía que esa era la única forma de parar al delantero. El penalti lo transformó él mismo. Y sin ningún momento de pausa, Andrés decidió acabar con el partido en un golazo de crack, tanto en el pase en profundidad de Esparza, como en la jugada del delantero y su finalización de jugador de élite.
Este gol acabó con cualquier tipo de esperanza cantabra y el resto del encuentro fue muriendo con una Gimnástica incapaz para crear algún peligro y con los locales esperando atrás para en cualquier momento machacar definitivamente a su rival en un contragolpe. Fue en el ochenta y siete, cuando después de un disparo de Esparza, que no parecía tener peligro, Ruyales despejó mal y David Sanz tuvo la caña preparada para castigar a los visitantes con el tercero.
Y se acabó el partido, y se acabó un año que nos habría gustado no verle el fin. A la pregunta de un compañero sobre un hipotético regalo de reyes, el mister De La Nieta respondió "Virgencita que me quede como estoy". El mister ha sido el hombre del año, a pesar de gustarle el primer tiempo de hoy. Si hay alguien que no opine lo mismo que tire la primera piedra.
David Vozmediano
Deportellano